Cómo blanquear los dientes de forma natural

La sonrisa es lo primero en que en la mayoría de ocasiones nos fijamos cuando conocemos a una persona. Y lo más importante de esta sonrisa y de lucir una sonrisa bonita es, sin duda, tener unos dientes en buen estado, a poder ser blanqueados y que desprendan luminosidad. Pero no siempre es fácil conseguir esta sonrisa, ya que determinados agentes externos, de alimentación, de salud y de higiene hacen que el tono blanco natural de los dientes vaya oscureciendo.

Causas de oscurecimiento de los dientes

En ocasiones los dientes cambian de color debido a nuestra mala alimentación pero también puede deberse a un problema de salud.

  • Hay una serie de alimentos que contribuyen a oscurecer la dentadura: entre ellos podemos encontrar el chocolate, el vino y el café.

  • El tabaquismo es otra de las principales causas del cambio de color en los dientes. Primero tienden a amarillearse y, tras muchos años de adicción al tabaco, pasan a adquirir un tono más grisáceo que si no se trata de inmediato se instala en los dientes de forma permanente.
  • La falta de higiene dental hace que la suciedad se acumule en los dientes y sea complicado eliminar la tonalidad que adopta.
  • Algunos medicamentos contienen algunas sustancias que, tomados de forma continuada, cambian el aspecto y color de nuestras piezas dentales.
  • Al igual que el resto de partes de nuestro cuerpo, los dientes también cambian de aspecto debido al paso de los años y el envejecimiento.

Remedios naturales para blanquear los dientes


Pero existen soluciones naturales para mantener nuestros dientes limpios y sanos y con un aspecto mucho más natural sin necesidad de recurrir a tratamientos caros que no siempre son efectivos.

Aceite para blanquear los dientes

Una solución para eliminar la suciedad que se acumula en las partes más complicadas de la dentadura es realizar enjuagues con aceite orgánico vegetal sin llegar a tragarse la solución. Debemos tratar de hacer pasar el aceite entre aquellas zonas donde se acumule mayor cantidad de suciedad. Posteriormente, limpiaremos los dientes de forma convencional.

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Bicarbonato como blanqueador dental

El bicarbonato es un remedio que se emplea tanto para uso oral como para trucos caseros. Se emplea para sacar brillo y blanquear zonas y superficies del hogar que cambian de color o incluso para eliminar manchas en prendas de ropa, por ello también es una solución perfecta para blanquear los dientes y arrastrar la suciedad y las manchas más incrustadas en ellos.

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Blanquear los dientes con fresas

Puede parecer que las fresas hagan el efecto contrario a lo que estamos buscando por su color rojizo, pero consumir fresas intentando que éstas toquen lo máximo posible nuestros dientes hará que su aspecto sea más blanco que anteriormente. Además, podemos realizar un puré con fresas y lavarnos los dientes con un cepillo dental como de forma normal. No es un tratamiento que se recomiende realizar a diario, pero una vez por semana nos hará ver nuestra dentadura mucho más blanca.

Cáscara de naranja para blanquear los dientes

Cuando pelamos una naranja siempre desechamos la cáscara, y es una buena solución como blanqueador dental. Si la piel de la naranja conserva en su parte interior el color blanco, podemos frotar con este extremo nuestros dientes como si los estuviéramos limpiando. Tras cada uso la piel se debe de cambiar por otra. Es un tratamiento natural que podemos realizar una vez al día y notaremos sus efectos casi inmediatos en nuestros dientes.

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Existen muchas soluciones para aclarar nuestros dientes de forma natural que afectan menos a nuestra dentadura que los productos químicos que adquirimos en el supermercado. Además, es un remedio natural que resulta económico y fácil de realizar en casa.

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