El aceite bronceador es utilizado por mucha gente que quiere coger un tono de bronceado de la piel de una forma rápida y poder realizarlo en sus propias casas. Evidentemente, existe la alternativa de comprarlo, pero fabricando el aceite bronceador en casa sabemos cuales son los ingredientes que estamos incluyendo para saber si son positivos o no en nuestra piel. Existen diferentes tipos de aceites bronceadores que podemos realizar en casa, así que solo tendremos que revisar de los que disponemos y empezar a realizarlos.
1. Zanahoria, el bronceador natural por excelencia
La zanahoria es rica en betacarotenos, y como ya sabemos, es perfecta para aumentar la intensidad del bronceado en nuestra piel, así que podemos optar por consumirla directamente o realizar un zumo con ella y mezclarla con aceite de oliva. De este modo obtendremos un aceite bronceador que nos proporcionará un tono natural y duradero.
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2. Café
El café molido, por su tonalidad oscura, también nos aportará nutrientes que ayudarán a mejorar el tono de nuestra piel en la época estival. La mezcla debe realizarse con aceite de oliva y aroma de vainilla.
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3. El aloe vera también ayuda al bronceado
El aloe vera es un ingrediente necesario para casi todas las dolencias y casi todos los tratamientos, de modo que para realizar el aceite bronceador también podemos optar por incluirlo, ya que nos ayudará a proteger la piel mientras la exponemos a las radiaciones del sol y también aliviará el excesivo calor que ocasiona. El modo de empleo perfecto para ello es realizar una mezcla de aloe vera natural con aceite esencial de coco. El aroma será inigualable y el bronceado será espectacular.
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4. Mejora tu moreno con té negro
Otro de los elementos que nos ayudarán a mejorar el bronceado de nuestra piel es el té, sobre todo el té negro, ya que por su color tiene más probabilidades de hacernos aumentar el tono bronceado de nuestra piel. La solución está en hervir unas cuantas bolsitas de té negro junto al agua, de modo que al final nos quedará una solución de agua oscura. La mezclaremos con unas cucharadas de aceite de coco y, una vez la mezcla se haya enfriado, lo meteremos en el interior de un pulverizador para poder hacer más sencilla su aplicación.
5. Manteca de karité
Si preferimos un ungüento para poder untar en la piel en lugar de un pulverizador de agua, la solución está en mezclar manteca de karité con té negro, y a continuación añadirle a esta composición unas cucharadas de aceite de coco. Con esta mezcla no existirá necesidad de estar constantemente repitiendo la aplicación, ya que permanece durante horas en la piel.
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6. Aceite de Monoï como bronceador
Si disponemos de aceite de Monoï también podemos realizar una mezcla con zumo natural realizado previamente con zanahorias. De este modo, conseguiremos una mezcla que, a parte de broncearnos, también ayudará a que nuestra piel se encuentre fresca y se regenere, algo muy necesario durante el verano, el contacto con el sol y con el agua de la playa y el cloro de las piscinas.
Debemos tener en cuenta que es necesario broncearse en verano pero también lo es protegerse del sol, así que antes de aplicar el bronceador podemos untar nuestra piel con crema protectora solar, ya que el sol hará efecto igualmente en la piel pero sin peligro de poder quemarnos o coger alguna enfermedad. Además, es necesario hidratarnos también desde el interior, bebiendo abundante agua antes, durante y después de exponernos al sol, al igual que consumir fruta y verdura que contienen altas cantidades de vitaminas y de agua.
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