Las sales de baño son uno de esos ingredientes únicos y especiales para hacer un baño relajante y sentirse como si estuvieses en un spa en casa. Si además son sales de baño caseras, la experiencia es aún más satisfactoria y saludable. Este tipo de sales de baño las puedes adquirir en tiendas o prepararlas tu misma en casa sin gastarte mucho dinero y logrando una gran multitud de beneficiosos para la piel y para la salud en general.
Si te interesa entrar al reto de aprender a hacer sales de baño caseras y ecológicas, en este artículo te ofrecemos una serie de consejos para conseguir hacerlas. ¡Cuida tu piel de forma natural y divertida haciendo tú misma sales de baño con los aromas y colores que más te gusten!
¿Por qué elegir sales de baño caseras?
Las sales de baño en general suponen un beneficio extra a la hora de proceder a efectuar la higiene de nuestra piel y el descanso de nuestro cuerpo y mente. Así, si te sumerges en una bañera con sales de baño conseguirás relajar tus músculos, dejarás de lado el estrés e irás energizándote y recuperando todo el vigor perdido durante la jornada de trabajo.
Un momento para desconectar y sentirnos como si estuviésemos en un spa rodeados de los aromas y las esencias más delicadas, sugerentes y reparadoras. Una sensación que se multiplica si además somos nosotras mismas las que hemos elaborado nuestras sales y hemos buscado aquellas sales minerales y aceites esenciales que más nos gustan.
¿Cómo hacer sales de baño caseras y ecológicas?
Preparar unas sales de baño caseras es muy sencillo y hasta existen kits infantiles para la elaboración de este tipo de productos para el baño y cuidado de nuestra piel. Una experiencia de lo más divertida y satisfactoria que podemos hacer en familia y con los más pequeños de casa. Para hacer unas sales de baño caseras y ecológicas debemos optar por ingredientes naturales que podamos conseguir de forma sencilla en tiendas y perfumerías de nuestra localidad.
Así, precisarás hacerte con un kilo de sal marina muy gruesa. 3 cucharadas de sales de magnesio o sales Epsom, 2 cucharadas de bicarbonato de sodio, unas gotitas de colorante alimenticio (decide tu el color que más te guste), unas gotas de aceites esenciales y flores o plantas secas para añadir un toque de color y un aire natural y agreste.
Ten en cuenta que puedes realizar la mezcla de aceites esenciales que más te guste o buscar combinaciones que te aporten el mayor número de beneficios posibles. Entre los aceites más recomendados se encuentra el aceite de lavanda, el de geranio, el de abedul o el de rosas, pudiendo combinarlos entre sí o con aceites frutales como el de mandarina o el de geranio. ¡Prueba y encuentra tu combinación más especial!
Ingredientes para hacer unas sales de baño caseras y ecológicas
Lo primero que debes hacer para elaborar sales de baño caseras y ecológicas es poner el kilo de sal marina gruesa y ponerla en dos botes con tapa. Cogeremos uno de ellos y le añadiremos el colorante de color que hayamos elegido e iremos moviendo el frasco para que el colorante tinte toda la sal. La otra mitad de la sal hemos de dejarla de su color natural e iremos añadiendo en ambos frascos una cucharada y media de sales de Epsom, una de bicarbonato de sodio y las gotas de aceites esenciales, unas 15 de cada aceite por frasco.
Cerramos los botes y los agitamos para que los ingredientes se mezclen bien y por último pondremos las flores secas y volveremos a agitar los tarros para que se integren y repartan por el frasco. Al tener sales de dos tonos, natural y del color que hayamos elegido, podremos y pasando las sales de los dos frascos a uno más grande e ir combinando los colores para crear un frasco de sales de lo más original.
Ahora solo tienes que probarlas en un baño de lo más relajante y disfrutar de tu momento de relax. Ten en cuenta que solo vienen a durar unos tres meses, así que no escatimes y date el capricho de bañarte con sales todas las semanas.
