En ocasiones, dependiendo del momento anímico en que se encuentre una persona, las condiciones climatológicas a las que se enfrente, el cambio de estación, el abuso de tintes, secadores o planchas, el consumo de medicamentos, alcohol y tabaco... el pelo sufre cambios y tiende a debilitarse, las puntas se abren, se cae, pierde vida y parece apagado. Si a esto le añadimos que no siempre se encuentra el tiempo necesario para dedicarle al cabello obtenemos como resultado un pelo triste.
Pero podemos optar por una alternativa a las mascarillas, acondicionadores y champús, y se trata de una opción mucho más natural: los aceites. Se elaboran a partir de elementos orgánicos como plantas, flores, frutos...y nos aportan muchos beneficios.
Aceites para el pelo
- ¿Necesitas avivar tu cabello? El aceite de aguacate contiene unos aceites grasos que lo convierten en el aliado perfecto, devolviendo todo el brillo a tu pelo. Es un gran hidratante y se puede emplear como suavizante natural.
- El clásico aceite de oliva fortalece el cabello y además es un buen antioxidante, además repara el cuero cabelludo.
- El aceite de romero aumenta el crecimiento del cabello, previene su caída y también las canas. Consulta más trucos para reducir las canas sin tinte y luce un color brillante.
- Las puntas abiertas son otro de los quebraderos de cabeza, y el aceite de ricino las combate, a parte de suavizar el cabello.
- El aceite de coco nutre el cabello y lo repara desde la raíz.
No es menos importante saber cómo aplicarse el aceite en el cabello, ya que un exceso del mismo puede dejar un efecto que no esperamos.
¿Cómo aplicar el aceite en el cabello?
En primer lugar, es importante aplicar el aceite con el pelo seco, no importa que esté sucio o limpio. Las indicaciones que se deben seguir son las siguientes:
- Desenredar bien el cabello para que no queden nudos y el aceite penetre bien en todas las capas.
- Aplicar mechón por mechón para que todo el cabello quede completamente untado en aceite. Si el cabello que se está tratando tiene tendencia a ser más graso, se debe intentar aplicar menos aceite.
- Atar en pelo con un recogido, una o varias trenzas o incluso con un gorro de ducha o plástico.
- Puedes darle calor al cabello con un secador para que el aceite penetre más.
- Esperar, al menos, media hora para que haga efecto.
- Al lavarlo, aplicar agua templada y champú abundante sobre el cuero cabelludo que es donde se suele acumular mayor cantidad de grasa (y el aceite no hace más que acentuarla) y acondicionador sobre todo en las puntas.
- Repetir esta aplicación al menos 2 veces a la semana para notar los resultados, o bien combinar un día a la semana con un día de mascarilla normal.
¿El aceite es válido para todo tipo de cabellos?
La aplicación de aceite se recomienda en cabellos rizados y con tendencia a secarse, pero es un remedio apto para todo tipo de cabellos que quieran obtener una dosis extra de brillo, fuerza e hidratación.
Lo que hay que tener en cuenta, principalmente, es que se debe aplicar de medios a puntas, y solo en caso de que un cabello se encuentre muy deshidratado aplicar en la raíz, ya que es la zona con mayor tendencia a engrasarse y hay que prevenirlo.
Los beneficios que aporta el aceite a todos los cabellos son innumerables, así que no se puede descartar ningún tipo. Por lo tanto, si deseamos que nuestro cabello crezca con mayor rapidez, aportarle una dosis de colágeno, regenerarlo celularmente y darle una sesión de belleza tras una temporada de mar y piscina, es la mejor opción, económica y fácil. Además, se puede realizar en casa.
