Cada vez son más las personas adeptas a realizarse sus propios cosméticos en casa, y estos van desde los champús, los acondicionadores, las mascarillas para el cabello... pasando por los exfoliantes para la cara y el cuerpo, las cremas naturales para las diferentes necesidades de cada tipo de piel...hasta, evidentemente, las mascarillas caseras para la cara. Y es que es la mejor alternativa para ahorrar dinero mientras tenemos la certeza de que estamos empleando productos naturales que no van a afectar negativamente a nuestro organismo.
¿Qué ingredientes no debemos olvidar en nuestras mascarillas naturales para la cara?
Ante todo, debemos tener en cuenta que necesitamos algunos elementos base desde los que podemos realizar cualquier tipo de mascarilla pero también sin olvidar los específicos de cada tipo de piel o cada tipo de tratamiento, dependiendo de la edad de la piel, el sexo, las necesidades, sus rutinas diarias...
Aceite de oliva
Si la piel sobre la que vamos a aplicar la mascarilla casera sufre de deshidratación, está muy seca o se ha expuesto demasiado al sol en las últimas semanas podemos aplicar una mascarilla que contenga aceite de oliva. Este producto cuyas bondades son infinitas nos ayudará a preservar la juventud de la piel y que luzca más hidratada, con mejor tonalidad y mayor luminosidad.
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Aguacate para la cara
En caso de querer regenerar una piel excesivamente castigada debemos optar por mascarillas caseras elaboradas con aguacates maduros, ya que son mejores para manipular y para deshacer y mezclar con otros elementos. El principal beneficio de este producto es su función antiedad y el aumento que supone en la hidratación para la piel, mejorando en todos los aspectos.
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Elaborar mascarillas caseras con café
Si a parte de elaborar una mascarilla queremos que esta sea exfoliante, el producto perfecto es el café, ya que cuando pase el tiempo suficiente para eliminarla, frotaremos con el agua para que se lleve detrás las impurezas que habitan en los poros de la piel de la cara. Además, el café es una fuente de antioxidantes que nos ayuda a mejorar la circulación de la piel, por lo que son todo ventajas.
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Yogur en las mascarillas
Son muchos los ingredientes que podemos emplear para hacer mascarillas pero en todos se necesita una base, que, en este caso, puede ser el yogur natural son azúcar. Y es que, este producto también aporta consistencia, firmeza y ligereza a las pieles que necesiten un toque extra de luminosidad y rejuvenecimiento.
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Miel
Otro producto indispensable para hacer mascarillas para cualquier tipo de piel es la miel, un producto que termina con todas las bacterias y deja la piel suave y con un brillo y una limpieza espectaculares. Un consejo sería utilizar la miel para elaborar mascarillas para personas con edad más avanzada que deseen rejuvenecer su tez.
El pepino, un básico en las mascarillas caseras
Como hemos visto en muchas escenas diarias, el pepino es un indispensable para los tratamientos naturales de la piel de la cara. En este caso no las aplicaremos en rodajas sino haciendo un puré junto a otros ingredientes, de modo que consigamos una mascarilla muy suave y fresca, perfecta sobre todo para aquellas pieles que sufren rojeces, alergias o se han expuesto durante muchas horas al sol para, de este modo, aliviarlas.
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Mascarilla con tomate
Si lo que deseamos es eliminar las impurezas, los poros y los granitos de nuestra piel, el mejor aliado es, sin duda, el tomate. Podemos realizar un puré con el mismo y conseguir una mascarilla ideal para lucir una piel más suave e hidratada.
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