La moda de los tatuajes jamás ha desaparecido, aunque si que han ido variando los motivos, los dibujos, el tamaño y los colores que se graban en la piel, pero esto no significa que su su curación haya evolucionado mucho, sino que debemos seguir teniendo cuidados con ellos una vez lleguemos a nuestras casas para evitar que se nos infecten y tengamos unas consecuencias desagradables en la piel durante un tiempo, afectado también a la futura calidad y nitidez del tatuaje que nos hayamos realizado. Por ello, cuando una persona se tatúa, el profesional que realiza este tatuaje le dará consecuencias para curarlo como es debido en los próximos días, pero aunque hay muchas cremas a la venta, también hay remedios naturales que son más efectivos, y que podemos realizar de forma casera.
Vaselina estéril para curar el tatuaje
Es el método con el que trabaja el tatuador, y el que mejor nos protegerá de agentes externos una vez seamos nosotros mismos los que tengamos que hacernos cargo de nuestro tatuaje y de su buen desarrollo. En este caso, cuando hayamos lavado el tatuaje, podemos aplicar durante unos minutos la vaselina para que se humedezca y se mantenga en perfectas condiciones. Con este producto, estaremos evitando que se deshidrate y que cambie el aspecto de la tinta.
Maryna Pleshkun || Shutterstock
Aloe vera para el tatuaje
Hay un producto que siempre resulta imprescindible para tratar las distintas afecciones de la piel, y es el aloe vera, por lo que también resulta indispensable para ayudarnos a que la herida del tatuaje cicatrice mejor y no queden marcas de ella. Además, aplicando frecuentemente aloe vera sobre el tatuaje estaremos humedeciendo la zona y evitando que se deshidrate, haciendo que desaparezca parte de la tinta y presente un aspecto más descuidado.
Curar el tatuaje con miel
Como bien sabemos, la miel natural es un producto antibacteriano que nos permite deshacernos de los posibles gérmenes que podemos tener en el cuerpo, tanto a nivel interno como externo. Si aplicamos miel sobre el tatuaje estaremos evitando que el tatuaje se infecte, aparezcan heridas y pus y tengamos que acudir a un médico para que nos proporcione antibiótico. En este caso, tras lavar la zona con agua y jabón neutro, la secaremos con una gasa y posteriormente aplicaremos una fina capa de miel natural, manteniéndonos con el tatuaje al aire libre durante unos minutos para posteriormente eliminar la miel para que no se nos pegue a la ropa.
Aceite de oliva para curar los tatuajes
Pero cuando hablamos de hidratar y regenerar una zona del cuerpo que ha sido afectada, en este caso, por un factor externo, podemos tratarla con aceite de oliva. Este producto de origen totalmente natural nos ayuda a hidratar el tatuaje y a que se mantenga en perfectas condiciones. Si rápidamente nos vamos a poner ropa encima o vamos a tocar algo con la parte del cuerpo en la que llevemos el tatuaje, podemos ponernos encima una gasa, o esperar unos momentos con el aceite de oliva sobre la piel para posteriormente limpiarlo con un paño con agua y jabón neutro para proceder a vestirnos, pero es mucho más conveniente llevarlo sobre la piel unos minutos.
Aceite de almendras dulces para el tatuaje
Pero si el aceite de oliva es reparador y beneficioso para los tatuajes, también lo es el aceite de almendras dulces, ya que con él se consiguen efectos muy positivos en la piel. El procedimiento para aplicarlo es igual al de el aceite de oliva.
Curar bien un tatuaje con cosmética natural es imprescindible para conseguir lucir una piel sana y un tatuaje en buenas condiciones.
