El envejecimiento de la piel se define como un proceso biológico que resulta inevitable con el paso del tiempo. Por lo general, comienza a ser visible a partir de los 40 años, cuando comienzan a aparecer pequeñas arrugas que se van haciendo cada vez más evidentes. Este proceso se da por la disminución hormonal vinculada con las células cutáneas, así como por la reducción de colágeno y elastina.
Claro que hay un tipo de envejecimiento que puede evitarse con unos cuidados naturales para la piel y correctos hábitos. Se trata del envejecimiento prematuro, el cual surge por factores externos, como por ejemplo los rayos solares, así como por hábitos de vida poco saludables.
5 hábitos ideales para retrasar el envejecimiento de la piel
¿Cómo lucir una piel tersa y joven por más tiempo? Existen métodos 100% naturales para evitar que las arrugas y las líneas de expresión lleguen antes de tiempo. Toma nota de este tratamiento natural para retrasar el envejecimiento de la piel a partir de hábitos de vida saludables:
1) Descanso adecuado
Dormir bien es una de las pautas más importantes para evitar que aparezcan arrugas antes de tiempo. Durante las horas de descanso el organismo segrega una serie de sustancias fundamentales para la regeneración celular, esencial para que la piel se mantenga saludable y con un aspecto radiante. Así, si no se descansa bien, esta actividad no se puede realizar, perjudicando con ello el estado y aspecto de la piel.
Lo ideal es dormir entre siete y ocho horas diarias. Es el tiempo que el organismo necesita para su reparación. Así, existe un menor riesgo de que aparezcan signos de la edad de forma prematura.
2) Alimentación equilibrada
Por supuesto, es esencial seguir un plan de alimentación saludable y equilibrado. De este modo se proporcionan los antioxidantes, vitaminas, minerales y otros nutrientes esenciales para el buen funcionamiento del organismo. Tienen un papel protagonista en la restauración de la piel y evitan el daño oxidativo que causan los radicales libres, tales como los rayos solares o la polución.
La dieta debe estar basada en alimentos con un alto valor nutricional como frutas, verduras, legumbres y cereales integrales.
3) Protección solar
Los rayos UV del sol son una de las principales causas del envejecimiento prematuro, además de otras afecciones cutáneas tales como quemaduras o cáncer de piel. Es importe utilizar una crema de protección solar adecuada a cada tono y tipo de piel durante todo el año, no sólo en verano. Además de elaborar tu propio protector solar casero y aplicar aftersun sobre tu piel cada vez que la hayas expuesto al sol durante un largo periodo de tiempo, también se recomienda utilizar sombreros y gafas de sol, elementos que sirven para protegerse de los rayos solares.
Los daños causados por el sol en la piel generalmente no se notan de inmediato, pero a medida que pasa el tiempo se hacen visibles.
4) Hidratación
La hidratación es fundamental para evitar el envejecimiento prematuro de la piel. Se recomienda consumir entre dos y dos litros y medio de agua diarios. Un hábito esencial para evitar la sequedad de la piel, uno de los factores que más acelera la aparición de arrugas y líneas de expresión.
5) Ejercicio físico
Y, por último, es importante practicar ejercicio físico con regularidad ya que favorece la regeneración de la piel y ayuda a que esta se mantenga en perfectas condiciones durante más tiempo. Mediante la práctica de ejercicio físico el organismo elimina distintas sustancias tóxicas que resultan perjudiciales para la salud y que favorecen el envejecimiento prematuro de la piel. Además, es el mejor modo de prevenir la flacidez tanto en el rostro como en el cuerpo.
Siguiendo estas pautas tan sencillas retrasar el envejecimiento de la piel de manera natural resulta de lo más sencillo. Se trata de incluirlas en el estilo de vida, de modo que formen parte del día a día. Se puede empezar a evitar el envejecimiento prematuro de la piel desde los 20 años, por lo que no es necesario esperar a la madurez para aplicar estas pautas.
