Aunque nos esforcemos en comer de manera sana y equilibrada, a veces es difícil cubrir todas las necesidades de vitaminas y minerales que nuestro organismo precisa. Además, si comemos siempre lo mismo y no introducimos variedad de tipos de alimentos podemos encontrarnos ante alguna deficiencia nutricional que mine nuestra salud y nos debilite. Pero estas carencias siempre dejan huella en nuestro cuerpo, especialmente en nuestro rostro, además de afectar al buen funcionamientos de algunos procesos fisiológicos como la sintetización de hormonas, la creación de células inmunitarias o la extracción de energía de los alimentos.
Si tienes curiosidad por saber si padeces alguna carencia, en este artículo te ofrecemos una selección de las 6 deficiencias nutricionales que se pueden reflejar en tu cara, tu cabello, uñas, piel y mucosas.
Reconoce en el rostro los síntomas de una deficiencia nutricional
¿Cómo puedes saber si padeces una carencia nutricional? Además de someterte a una revisión médica, puedes aprender a detectar carencias nutricionales en tu cara con los siguientes síntomas:
1. Una piel muy pálida o incluso con tono amarillento
Una piel demasiado pálida puede ser indicio de una deficiencia de vitamina B12. Una carencia que supone una producción menor de glóbulos rojos. Al ser menor el número de glóbulos rojos que circula en sangre, la piel adquiere un tono más blanco. Este tipo de anemia recibe como nombre anemia megaloblástica, teniendo como otros síntomas la falta de apetito, el cansancio, diarreas, entumecimiento de pies y manos y falta de concentración. Además, también pueden adquirir los ojos un tono amarillento. Si padeces este tipo de anemia deberás paliar estas carencias con suplementos diarios de esta vitamina.
2. Un sangrado de encías frecuente
Si cada vez que nos cepillamos los dientes, éstos nos sangran, entonces es posible que tengamos una carencia de vitamina C, una de las vitaminas esenciales para el fortalecimiento del sistema inmunitario. Además del sangrado de encías, una falta de vitamina C también va acompañado de la aparición de puntos rojos en la piel y un cabello seco y sin brillo. Si deseamos hacer frente a esta carencia de vitamina C debemos introducir en nuestra dieta para lucir la piel perfecta más hortalizas y frutas frescas, siendo especialmente interesantes frutas ricas en vitamina C como los kiwis, las naranjas y los pomelos o verduras como las coles o los pimientos rojos.
3. Una piel muy seca y con arrugas
La sequedad en la piel es también indicio de una falta de omega 3, esto es, de ácidos grasos. Estos aceites son esenciales para el organismo, especialmente para las defensas, las neuronas, los vasos sanguíneos y las retinas, además de combatir la piel seca y las arrugas. Además, el omega 3 es ideal para la prevención de enfermedades como la depresión, los trastornos del comportamiento, las inflamaciones o el cáncer. No dude en introducir estos ácidos grasos vía pescados grasos como el salmón o el bacalao o omega 3 de origen vegetal como las nueces, la chía, el cáñamo o los aceites de lino.
4. Ojos hinchados
Si tus ojos suelen hincharse, tienes la piel seca y las uñas quebradizas entonces puedes estar padeciendo una deficiencia de yodo. Otros indicios son tendencia a engordar, cansancio, taquicardías, pérdida de cabello, dificultades de concentración e inflamación de la tiroides. Si experimentas alguno de estos síntomas, entonces debes introducir en tu dieta sal yodada y algas.
5. Unos labios pálidos, sin color
Una palidez en los labios, sequedad y una tendencia a padecer boqueras son indicio de que al organismo le falta hierro y es preciso aportar este mineral al cuerpo. Otros indicios son la falta de aliento, un cansancio intenso, dolores en el tórax y padecer resfriados de forma continuada. Para poder suplir estas carencias se puede recurrir a alimentos vegetales como las coles, las lentejas, el tofu, las espinacas y el hígado de ternera, siendo ideal acompañar estos platos con vitamina C para favorecer la absorción del hierro. Los zumos de naranja, el kiwi o el pimiento rojo te ayudarán a absorber mejor el hierro.
6. Un cabello quebradizo y seco
En este caso, tener un pelo con tendencia a caerse, muy fino y un cabello muy quebradizo es síntoma de una deficiencia de vitamina B7 o biotina. Una carencia que puede paliarse comiendo patatas, plátano, coliflor, aguacates, almendras, guisantes y nueces y también alimentos de origen animal.
