Nadie en su sano juicio negará la importancia de utilizar protector solar para protegernos de los dañinos rayos del sol, en especial en verano. Sin embargo, cada vez existe más controversia sobre los protectores solares convencionales debido al uso de productos químicos, que además de dañar nuestra piel son contaminantes. En los últimos años hemos vivido el auge del protector solar natural para la piel, que prescinde de estos dañinos productos químicos y es mucho más amigable con el medio ambiente.
El uso de aceites como el de oliva, el de sésamo, el de coco, el aloe vera, el aceite de semilla de frambuesa o el de jojoba es una alternativa muy válida a los protectores solares que todo el mundo utiliza. Los protectores solares naturales combinan algunos de estos aceites, y todo el mundo los puede preparar en casa. Además del aceite solo necesitarás manteca, cera de abeja y óxido de zinc, el elemento clave a la hora de garantizar un nivel de protección solar mayor o menor. Y nos sirven para todo tipo de pieles.
Protector solar natural para piel grasa
Uno de los grandes problemas de los protectores solares convencionales es que taponan los poros de la piel, dificultando algo tan natural como la sudoración. Si los poros se obstruyen, la piel se vuelve más grasa y el uso de protectores solares químicos no hace más que empeorar la situación. Sin embargo, el uso de estos protectores solares a base de aceites y productos naturales no solo evita que se taponen los poros, sino que le dará a tu piel un mejor aspecto, eliminando la grasa que se acumula en la piel.
Por ejemplo, si utilizas aceite de jojoba en tu protector solar natural para piel tendrás un ingrediente que expulsará la suciedad de los poros de forma natural, abriéndolos; pero que además, al tener una textura y unas propiedades similares a las del sebo engañará al cuerpo. Se reducirá la producción de sebo y el resultado será un rostro menos graso. De esta manera, la piel queda hidratada y protegida ante los rayos del sol. El de jojoba es el mejor ejemplo de estos aceites, pero no el único que nos ayuda a protegernos del sol y luchar contra la piel grasa.
Protector solar natural para piel sensible
Otra de las consecuencias del uso de los protectores solares químicos son las alergias y otros problemas relacionados con cómo afectan a las pieles más sensibles. El carácter natural de los protectores alternativos a partir de aceites vegetales en vez de protectores y filtros químicos hace que sean unos protectores para personas con pieles sensibles o reactivas. En caso de padecer problemas cutáneos como pueden ser eccemas, psoriasis o dermatitis no debes tener miedo al utilizar estos protectores, que son muy suaves.
Las pieles sensibles también se aprovechan de la hidratación y nutrición que nos aportan los protectores naturales, que a diferencia de los químicos no penetran en la piel, reduciendo todavía más las posibilidades de sufrir reacciones alérgicas. Otro punto a favor de estos protectores es que su efecto es inmediato, así que puedes exponerte a la luz solar justo después de aplicarte el protector, algo que no pasa con los químicos. Además, son impermeables aunque conviene aplicar de nuevo el protector cada unas dos horas.
Más allá de los beneficios que puedan tener estos protectores sobre las pieles grasas o sensibles en comparación con los protectores químicos o convencionales, conviene recordar que el nivel de protección que nos aportan es ligeramente inferior. Por eso, además de reforzar la protección cada cierto tiempo conviene evitar tomar el sol las horas más peligrosas del día y utilizar cremas hidratantes o aftersuns naturales para minimizar los efectos del sol.
